¿Qué es el Next Generation EU?
El Next Generation EU (Próxima Generación UE) engloba un conjunto de medidas que la Unión Europea y los Estados miembros acordaron el pasado 21 de julio de 2020 de crear con el fin de hacer frente a la crisis provocada por la COVID-19. Suponen 750.000 millones de euros, en forma de préstamos reembolsables (360 mil millones) y transferencias no reembolsables (390 mil millones) que se harán efectivos hasta el 2026.
La mayor parte de este importe, alrededor del 89%, están destinados al Mecanismo para la Recuperación y Resilencia (MRR) cuyo objetivo es apoyar la inversión y la reformas en los Estados para desarrollar economías sostenibles, resilentes. La otra gran partida es el REACT EU orientado a promover la recuperación ecológica y digital.
Respecto al MRR, el 70% de las transferencias nos reembolsables concedidas deben ser comprometidas entre el 2021 y el 2022, y el resto en el 2023. Los recursos del REACT-EU deben ser ejecutados en el 2021 y 2022.
El paquete de medidas de Next Gen EU supone un mecanismo independiente y adicional a los Fondos Estructurales para hacer frente a la situación generada por el COVID 19.
¿Cuáles son los objetivos del Next Gen EU?
La finalidad de Next Generation EU se resume en los siguientes objetivos: promover la cohesión económica, social y territorial de la EU; fortalecer la resiliencia y la capacidad de ajuste de los Estados miembros; mitigar las repercusiones sociales y económicas de la crisis de la COVID-19; y apoyar las transiciones ecológica y digital. Por lo tanto, la Unión Europea busca incentivar todas aquellas medidas que lleven al crecimiento de Europa, así como la modernización de su economía a través de la digitalización y el desarrollo sostenible.
¿Qué son los Planes Nacionales de Recuperación y Resiliencia?
miembros de la UE para recibir el apoyo financiero. Por ello los Estados Miembros han de trabajar en los Planes Nacionales de Recuperación y Resilencia.
Esto planes deben incluir paquetes y proyectos concretos y adaptados a la realidad del Estado miembro para hacer frente a las consecuencias de la pandemia; contribuir a la transición verde y digital. Dichos planes son evaluados por la Comisión Europea para asegurar la consecución de los objetivos marcados.
Por su parte la Comisión ha enmarcado siete ámbitos de interés:
- Activación: puesta en marcha temprana de tecnologías limpias y aceleración del desarrollo y el uso de las energías renovables.
- Renovación: mejora de la eficiencia energética de los edificios.
- Carga y repostaje: fomento de tecnologías limpias para acelerar el uso de un transporte sostenible, accesible e inteligente.
- Conexión: despliegue rápido de servicios de banda ancha rápida en todas las regiones y hogares, incluidas las redes de fibra y 5G.
- Modernización: digitalización de la Administración y los servicios públicos.
- Ampliación: aumento de las capacidades industriales en materia de datos en la nube y desarrollo de procesadores de última generación y sostenibles.
- Reciclaje y perfeccionamiento profesionales: adaptación de los sistemas educativos en apoyo de las competencias digitales y la educación y formación profesional a todas las edades.
El Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia de España
El plan del Gobierno de España se basa en 4 ejes: la transición ecológica, la transformación digital, la cohesión territorial y social; y la igualdad de género.
- Agenda urbana y rural, cohesión territorial.
- Infraestructuras y ecosistemas resilientes.
- Transición energética justa e inclusiva.
- Administración pública del siglo XXI.
- Modernización y digitalización del ecosistema industria-servicios y de la pyme, impulso al emprendimiento.
- Pacto por la ciencia y la innovación; refuerzo del Sistema Nacional de Salud.
- Educación y formación continua, desarrollo de capacidades.
- Nueva economía de los cuidados y políticas de empleo.
- Impulso de la industria de la cultura y el deporte.
- Modernización del sistema fiscal.
Las diez políticas palanca integran a su vez 30 proyectos o líneas de acción, tanto de tipo regulatorio como de impulso a la inversión. Para todos ellos se identificarán las metas e hitos intermedios, los resultados esperados, el número de beneficiarios, así como el coste detallado de cada elemento. Para asegurar la adecuada ejecución de los proyectos, y la aplicación de los fondos se crearán estructuras de ejecución, seguimiento y coordinación que permitirán la colaboración interministerial, público-privada, con las comunidades autónomas y con las entidades locales.
Las partidas económicas que son objeto de inclusión en estos planes, abarcan desde inversiones en capital humano (educación, formación, salud, protección social…), capital fijo (infraestructuras, I+D+i…) y capital natural (fuentes de energía renovable natural, protección y restauración del medio ambiente, mitigación o adaptación al cambio climático…). Por ello, t odas estas inversiones pueden canalizarse a través de instrumentos financieros, esquemas de ayudas, subsidios u otros mecanismos